Este miércoles 25 de mayo llegaron a Washington DC dos buses más provenientes de Texas, que transportan a inmigrantes enviados por el gobernador de ese estado, Greg Abbott.

Jerson, un inmigrante de Nicaragua, llegó en este grupo a eso de las 6:00 am, en el primer bus. Dejó su país hace un mes y medio y, como otras personas, afrontó dificultades en su camino hacia la frontera sur de Estados Unidos.
El joven dejó su país debido a la falta de oportunidades y la represión que han sufrido los nicaragüenses por parte del gobierno de Daniel Ortega.
Los últimos tres días se los ha pasado sentado en el trayecto desde Texas hasta Washington DC, donde se encontró con un familiar que vive en el área del DMV. Aunque la mañana era fría, el alivio de saberse a salvo y cerca de su familiar le hizo sentir más feliz de haber llegado a su destino.
Después de observar en silencio la fachada de Union Station Jerson expresó en tono aliviado: “Estos zapatos me los encontré después de pasar el río. Los que traía se los llevó la corriente… Viendo ese edificio me acordé de eso y pensé en que gracias a Dios ya estoy aquí y que pronto voy a ver a mi familia. Todo este viaje es bien difícil”.
Con el nicaragüense viajaban otros 25 inmigrantes. Como ha sucedido con otras personas enviadas desde Texas, desde el 13 de abril pasado, los inmigrantes no saben muy bien hacia dónde van.

Sin embargo, casi todos los que llegaron en el bus junto con Jerson pudieron avisarles a sus familias, algunos manejaron desde New Jersey para buscarlos en DC.
Jerson fue uno de los dos inmigrantes que se quedaron en el área del DMV con algún familiar. El resto, entre ellos nicaragüenses, cubanos, venezolanos, colombianos y tres familias nigerianas, viajó hacia New York, New Jersey, Connecticut y Kentucky.
Desde el 13 de abril, cuando llegó el primer bus enviado por el gobernador Greg Abbott, diversas organizaciones, entre estas CARECEN y Catholic Charities, han recibido poco más de 40 autobuses.
Los grupos de voluntarios asisten a los inmigrantes y les ayudan a comprar los boletos para los que necesitan irse a otras ciudades. Así pueden viajar el mismo día que llegan a DC.
Antes de abordar el bus, los voluntarios los llevaron a una iglesia para darles alimentos, ropa caliente y con el fin de que puedan asearse.