A pesar de que una de las sequías más graves está llevando a que varias localidades de California deban regular su uso del agua, y que hasta el gobernador del estado haya amenazado con imponer restricciones a nivel estatal, en el condado de San Diego, al sur del estado, se han protegido de los potenciales problemas de suministro. Sin embargo, para algunos planificadores de agua en este lado del mundo, San Diego puede resultar un modelo o una advertencia.
Diversificación de fuentes a altos costos
A raíz de una grave sequía en la década de los 90s, que cortó su suministro en un 30% y diferencias con el principal proveedor de agua del estado que derivó en una búsqueda de autonomía, San Diego diversificó sus fuentes de suministro de agua, mejoró su conservación e invirtió en infraestructura hídrica costosa, incluyendo la planta desalinizadora más grande del hemisferio occidental, que elimina sal e impurezas del océano.
- De esta manera, la agencia de agua, que atiende a 24 servicios públicos, incluida la ciudad de San Diego, dice que puede evitar los cortes hasta al menos 2045, incluso durante los períodos secos. Pero esa seguridad ha tenido un costo.
- El precio del agua en el condado de San Diego es, a nivel mayorista, un 26% más costosa que en los distritos metropolitanos de agua, que sirven a Los Ángeles y otros condados aledaños.
- Y ahora, dos distritos rurales de riego del condado de San Diego, en donde están ubicadas grandes industrias del aguacate, quieren separarse del proveedor regional de agua, diciendo que pueden comprarla más barata. Si tienen éxito, el agua en San Diego podría volverse incluso más costosa.
El golpe de una menor demanda
A pesar de todas las inversiones en infraestructura y prácticas para ahorrar en el uso del recurso hídrico, los funcionarios del agua no previeron una caída en la demanda y sobreestimaron constantemente la cantidad de agua que se necesitaba.
- Ahora, San Diego no está buscando más agua y aunque podría ser una postura envidiable, las tarifas para pagar por el líquido no lo son tanto.
- Por una caída en esa demanda, los precios han aumentado un 4% en los últimos 5 años para cubrir los costos fijos, como una represa y la planta desalinizadora. Esos costos constituyen la mayor parte (un 90%) de los gastos anuales de la agencia.
- “El agua es un negocio terrible porque tenemos que promover que la gente use menos de nuestro producto y cobrarles más cuando lo hagan”, dijo Tom Kennedy, gerente general del Distrito Municipal de Agua Rainbow, una de las dos agencias de agua que intentan separarse de la autoridad de agua del condado de San Diego.
- Agentes del agua han advertido que los elevados costos del recurso también llegarán a otras partes del estado y la región oeste, por lo que tienen trabajo pendiente, a medida que el cambio climático continua agravando las sequías e impactando en los ríos que alimentan las reservas de California y el Río Colorado.
Con información de: AP