La aplicación CBP One fue expandida y ahora los migrantes pueden utilizarla para solicitar asilo en Estados Unidos, reseñó la cadena de noticias NBC.
Sin embargo, los defensores de los solicitantes se preocupan por lo que se hará con la información recogida y por el gran número de personas que no tienen acceso a internet.
Una gran falla
La aplicación designa un punto fronterizo en México al que deben acercarse los migrantes para recibir una cita en EEUU.
Pero algunas veces las citas pautadas por la aplicación son lejos de donde se encuentra el migrante, especificó Reuters.
Este fue el caso del venezolano José Huherta, que se encontraba en la ciudad fronteriza Ciudad Juárez.
Huherta comentó a Reuters que la aplicación le asignó una cita en Tijuana, San Diego, una ciudad a unos 1 mil 200 kilómetros de donde se encontraba.
"No tengo dinero, ahora tengo que caminar", expresó Huerta.
No todos tienen acceso a CBP One
Algunos migrantes no pueden utilizar la aplicación ya que tienen acceso limitado a Wi-Fi o porque no tienen teléfono, sea porque lo pierden o se lo roban durante el viaje.
"Una de nuestras principales preocupaciones sobre la aplicación es cómo afectará a la accesibilidad y una de las cosas que nos preocupa es lo complicado que es utilizar la aplicación para las personas que pueden no saber que necesitan un teléfono para acceder a ella, que pueden no tener una buena conexión Wi-Fi y los que pueden no entender el proceso de registro, la creación de una contraseña, obtener la verificación en dos pasos", expresó Raúl Pinto, abogado del Consejo Americano de Inmigración.
También existe la preocupación acerca de cómo las personas tendrán acceso a solicitar asilo en un puerto de entrada si no tienen la capacidad de descargar la aplicación desde donde se encuentran.
Algunos pagan por utilizar CBP One, a pesar de ser gratuita
Anteriormente, las organizaciones internacionales tenían acceso a la aplicación a través de sus propios teléfonos y podían ayudar a las personas que necesitaban conexión Wi-Fi y acceso a Internet. Pero esto condujo a abusos, explicó Pinto.
Según Pinto, había informes que señalaban que algunas organizaciones sin fines de lucro se negaban a usar la aplicación y algunos terceros cobraran dinero por ayudar a la gente a utilizarla.
Pinto reconoció los esfuerzos por hacer que la aplicación sea más accesible, pero puso en duda que la administración esté facilitando toda la información que la gente necesita para utilizarlo y que señaló que aún hay trabajo por hacer.
Dudas respecto al uso de la información personal
A los grupos de defensores de migrantes también les consterna cómo y para qué será utilizada la información personal de los usuarios de CBP One.
Los migrantes deben enviar información biográfica sobre ellos y su familia, así como una foto de su rostro.
Pinto indicó que la aplicación no guarda los datos de las personas, pero que la información introducida pasa por otras bases de datos gubernamentales, algunas de las cuales pueden conservar la información durante años.
CBP One cuenta con tecnología de seguimiento GPS, lo que ha levantado sospechas, aunque el gobierno federal ha dicho que no se utilizará para la vigilancia.
También utiliza el reconocimiento facial, una tecnología que ha demostrado tener sesgos.