Pocas personas sabían que Tori Bowie estaba embarazada cuando falleció, pero fue la eclampsia, una complicación del embarazo, lo que provocó su muerte. El informe de la autopsia, compartido esta semana por las autoridades, reveló que Bowie, de 32 años, murió por complicaciones relacionadas con el embarazo, tenía ocho meses de embarazo y que estaba en labor de parto cuando falleció.
NBC News reseñó que la Oficina del Sheriff del Condado de Orange, Florida, encontró a la atleta muerta en su casa el 2 de mayo luego de hacer un chequeo en una mujer de 30 años a la que no se había visto ni se había escuchado nada de ella en varios días.
Según la oficina del forense, la muerte se produjo de forma natural y los resultados toxicológicos fueron negativos. Bowie es recordada por haber ganado el oro en relevos 4x100 metros en los Juegos Olímpicos de Río en 2016, además de la plata en 100 metros y el bronce en 200 metros.
Preeclampsia y eclampsia
La eclampsia es una complicación del embarazo caracterizada por hipertensión arterial. Esta se desarrolla a partir de la preeclampsia, cuando una mujer que antes tenía una tensión arterial normal desarrolla de repente hipertensión y proteínas en la orina u otros problemas después de las 20 semanas de embarazo.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) informan que algunas mujeres con preeclampsia pueden desarrollar convulsiones durante o después del parto. Esto se denomina eclampsia, que es una emergencia médica.
La preeclampsia afecta a mujeres alrededor del mundo
La preeclampsia se caracteriza por hipertensión arterial, signos de insuficiencia orgánica y casi siempre daños hepáticos o renales. Puede provocar convulsiones, derrames cerebrales, parto prematuro o incluso la muerte de la madre y/o el bebé.
Es una de las principales causas de morbilidad materna y la Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que se da entre 5% y 7% de todos los embarazos. Anualmente, la preeclampsia es responsable de más de 70 mil muertes maternas y 500 mil muertes fetales en todo el mundo.
Si tienes preeclampsia puedes sentir dolores de cabeza, dificultad para respirar, visión borrosa o sensibilidad a la luz, aparición de manchas oscuras en la visión, dolor abdominal en el lado derecho, hinchazón de las manos y la cara (edema).
¿Quiénes tienen mayor riesgo?
Los CDC indican que el riesgo de preeclampsia es mayor si:
- Es la primera vez que da a luz.
- Tuvo preeclampsia durante un embarazo anterior.
- Padece hipertensión arterial crónica (a largo plazo), enfermedad renal crónica o ambas.
- Tiene antecedentes de trombofilia (enfermedad que aumenta el riesgo de coágulos sanguíneos).
- Está embarazada de varios bebés (gemelos o trillizos).
- Se ha quedado embarazada mediante fecundación in vitro.
- Tiene antecedentes familiares de preeclampsia.
- Padece diabetes de tipo 1 o 2.
- Padece obesidad.
- Padece lupus.
- Tiene más de 40 años.
En Estados Unidos, la tasa de preeclampsia en mujeres afroamericanas es un 60% superior a la de las mujeres norteamericanas Las mujeres negras no sólo tienen más probabilidades de padecer preeclampsia, sino también de sufrir peores consecuencias asociadas a esta enfermedad, como daños renales y muerte.
Si ya estás embarazada, recibe atención prenatal temprana y periódica; habla con tu médico sobre los medicamentos que tomas y cuáles son seguros; controla tu tensión arterial en casa con un tensiómetro; y aprende cuáles son los primeros síntomas de la preeclampsia.
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