Este miércoles 26 de julio se incendió el Templo del Gran Buda el cual se encuentra ubicado en la provincia de Gansú, en China. De acuerdo a medios internacionales el incendió provocó severos daños en gran parte de la estructura, aunque no se reportaron personas lesionadas.
En las imágenes divulgadas se ve la estatua y sus alrededores bordeados por las llamas, así como la vegetación y la infraestructura que rodea el sitio. El cuerpo de bomberos logró apagar las llamas y autoridades locales informaron que las reliquias culturales quedaron intactas, a pesar de las impresionantes imágenes. El templo alberga una réplica hecha en 1998 de una antigua estatua desaparecida durante la Revolución Cultural, la cual data alrededor del año 425.
La provincia de Gansu se encuentra en el noroeste de China y está atravesada por la famosa “Ruta de la Seda”. A través de esta antigua ruta, la seda de China se extendió al mundo occidental, y el budismo y las artes de la escultura y arquitectura budista se introdujeron en China.
A lo largo de los siglos, surgió el arte chino de la escultura budista. Los templos de las grutas, como las grutas de Mogao en Dunhuang, las grutas de Yulin, las cuevas del este de los miles de Buda, el templo de Bingling y las grutas de Maijishan, se encuentran dispersos por la vasta tierra de la provincia de Gansu.
No sólo son prueba viviente del trabajo duro y la sabiduría de los antiguos chinos, sino también antiguos testigos de la historia del intercambio económico y cultural entre los mundos oriental y occidental.