El mundo del béisbol está de luto tras conocer que Willie Hernández, exlanzador estrella de los Detroit Tigers y ganador del premio Cy Young en 1984, falleció a los 69 años en Florida.
Chad Crunk, portavoz de los Tigres, informó el martes que Hernández murió en Florida y que el equipo confirmó la muerte de Hernández con su familia. No se anunció la causa.
Originario de Aguada, Puerto Rico, Guillermo "Willie" Hernández comenzó su carrera en las Grandes Ligas con los Chicago Cubs en 1977.
El zurdo Hernández tuvo una carrera de 13 años, pero fue con los Tigers de Detroit donde alcanzó su mayor éxito y se consagró como una leyenda del deporte.
Campeón de la Serie Mundial
Hernández dejó una huella imborrable en el deporte. Formó parte del equipazo de los Tigres de Detroit, que se coronó campeón de la Serie Mundial de 19844.
En esa temporada, los Tigers tuvieron una actuación dominante con un récord de 104-58. Arrasaron en la Serie de Campeonato de la Liga Americana contra Kansas City y luego vencieron a San Diego en la Serie Mundial en cinco emocionantes juegos.
Logros individuales y reconocimientos
Esa misma temporada, Hernández logró un récord de 9-3 y 32 salvamentos en 33 oportunidades. Su efectividad fue impresionante, con un promedio de 1.92 en 80 partidos y 140 1/3 entradas lanzadas.
Además, hizo historia al ser uno de los pocos lanzadores en ganar el premio Cy Young y el premio al Jugador Más Valioso (MVP) en el mismo año.
Detroit adquirió a Hernández de los Phillies por Glenn Wilson unas semanas antes de la temporada de 1984.
Hernández formaría parte de tres equipos All-Star consecutivos entre 1984 y 19868. El boricua terminó con un récord de 70-63 y un ERA de 3,389, según el sitio web de la MLB.
El legado de Willie Hernández
El fallecimiento de Willie Hernández ha causado gran tristeza entre sus compañeros de equipo y la comunidad del béisbol.
Alan Trammell, exestrella de los Tigres y compañero de equipo de Hernández, expresó su pesar: "Willie Hernández fue un gran compañero de equipo, y lamento terriblemente la noticia de su fallecimiento. Nunca olvidaré la celebración de nuestro equipo juntos en el montículo después de que él registrara el último out de la Serie Mundial de 1984".
Hernández dejó un legado imborrable en la historia del béisbol. Su talento, su pasión por el deporte y su espíritu competitivo perdurarán en los corazones de los fanáticos.
