Tres soldados estadounidenses resultaron heridos, uno de ellos de gravedad, durante un asalto con aviones no tripulados iniciado por las milicias de la Resistencia Islámica proiraní en el norte de Irak, reveló por la Casa Blanca el lunes 25 de diciembre.
Un avión no tripulado lanzó un ataque en las primeras horas en el norte de Irak, que causó heridas a tres militares estadounidenses. Adrienne Watson, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, detalló este incidente en un comunicado de prensa.
Al enterarse del ataque, el presidente Joe Biden, que estaba pasando las Navidades en el retiro presidencial de Camp David, ordenó una contraacción inmediata. La tarea de formular una respuesta adecuada a los autores fue asignada al Departamento de Defensa de EEUU.
La respuesta de EEUU al ataque
En consecuencia, Biden ordenó atacar tres lugares, identificados como utilizados por la Resistencia Islámica y grupos asociados para operaciones con drones. Los detalles relativos a las bajas de estos ataques de represalia no han sido revelados.
Watson subrayó que la principal prioridad de Biden es la seguridad del personal estadounidense. Advirtió además que EEUU persistirá en su respuesta si continúan estos asaltos.
Conflicto
La Resistencia Islámica en Irak, apoyada por Irán, ha aceptado la responsabilidad de más de 80 asaltos contra objetivos estadounidenses en Siria e Irak desde mediados de octubre. Estos ataques se consideran una reacción al apoyo "consecuente" de Estados Unidos a Israel y al grupo islamista Hamás en la Franja de Gaza.
La Resistencia Islámica en Irak, junto con el Hezbolá libanés y los rebeldes Houthi yemeníes, observaron el alto el fuego en Gaza entre Israel y Hamás en la última semana de noviembre. Sin embargo, sus actividades se reanudaron tras el reinicio de los ataques aéreos israelíes sobre el territorio palestino.
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