La Oficina de Estadísticas Laborales reveló este martes que la inflación experimentó un modesto repunte en febrero, lo que señala un periodo de ajuste económico mientras la Reserva Federal considera el momento oportuno para posibles recortes de los tipos de interés.
Lo que debemos saber: los datos revelaron una subida de los precios del 3,2, un ligero aumento en comparación al 3,1% de enero, con una subida de los precios del 0,4% de enero a febrero.
La inflación repunta en febrero
Estos datos detallados reflejan un panorama económico más amplio, que ilustra un camino significativo hacia la estabilización de la inflación desde su tasa anual máxima del 9,1% a mediados de 2022.
Aunque la Reserva Federal está dispuesta a reducir los costes de los préstamos este año, la lucha contra la inflación sigue en pie, sobre todo después de un informe sobre la inflación de enero que no cumplió las expectativas.
Los costos que siguen subiendo: las cifras de febrero hicieron poco por aliviar las preocupaciones sobre la persistencia de los altos costes, especialmente en la vivienda y la gasolina, que en conjunto impulsaron más del 60% del incremento mensual de los precios.
Continúan los aumentos en el sector energético y de vivienda
El sector energético fue testigo de una subida del 2,3%, impulsada por los aumentos de los precios del fuelóleo, el combustible para motores y la gasolina.
Al mismo tiempo, los costes de la vivienda siguieron subiendo, con un aumento de los alquileres del 0,5% en febrero, a pesar de un ligero descenso en otro indicador clave de la vivienda.
Los analistas sugieren que el índice de precios al consumo podría no reflejar plenamente la actual estabilización o disminución de los precios del alquiler observada en todo el país.
Esta discrepancia deja a los responsables políticos sopesando los efectos retardados sobre la inflación general, especialmente en lo que respecta al enfriamiento de la inflación de la vivienda.
La inflación subyacente aumentó un 0,4%
Excluyendo las categorías más volátiles de alimentos y energía, la inflación subyacente se mantuvo en un aumento del 0,4%, en consonancia con la tasa de enero.
También se observaron subidas significativas en los precios de los boletos de avión, los seguros de automóvil y la ropa.