Una amenaza de bomba tuvo como resultado la evacuación de las escuelas de Little Axe, en el condado de Cleveland, Oklahoma, reseñó KOCO.
Funcionarios de la oficina del sheriff, en colaboración con las fuerzas del orden locales, llegaron a las instalaciones educativas, iniciando un plan de evacuación coordinado. Aunque esto causó una importante interrupción, fue un paso para proteger a los alumnos y al personal de posibles daños.
Los equipos encargados de hacer cumplir la ley llevaron a cabo un registro exhaustivo del recinto escolar. Su objetivo era eliminar cualquier posible peligro.
Tras el suceso, la oficina del sheriff del condado de Cleveland mantuvo en secreto los detalles de la amenaza, centrando sus esfuerzos en la investigación en curso. Su preocupación inmediata era identificar y detener al individuo o individuos responsables.
La jornada concluyó sin heridos físicos.