Los pilotos de Fórmula 1 pidieron a la FIA que los trate como adultos tras ser sancionados por usar lenguaje inapropiado. La Asociación de Pilotos de Grandes Premios (GPDA) criticó al presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, por su "tono y lenguaje" al abordar el tema. El comunicado destaca:
"Existe una diferencia entre insultar y usar el lenguaje de manera casual para describir situaciones".
Verstappen y Leclerc, sancionados por decir groserías
Max Verstappen, piloto de Red Bull y bicampeón de F1, comentó sobre su auto de manera coloquial durante el Gran Premio de Singapur, lo que resultó en una sanción de "trabajo de interés público". Charles Leclerc, de Ferrari, recibió una multa en el Gran Premio de Sao Paulo por expresarse con frustración tras casi chocar en México. Los pilotos consideran que las sanciones financieras afectan negativamente la imagen del deporte.
The Grand Prix Drivers' Association have urged Mohammed Ben Sulayem to "consider his own tone and language when talking to our member drivers, or indeed about them, whether in public form or otherwise" pic.twitter.com/vJVANZlRVI
— Sky Sports F1 (@SkySportsF1) November 7, 2024
Críticas al enfoque de la FIA
Lewis Hamilton, 7 veces campeón mundial, acusó a Ben Sulayem de utilizar un lenguaje con "elementos raciales" al comparar la conducta de los pilotos con la de raperos, informó BBC News. Hamilton y otros pilotos sugieren que las palabras emitidas durante las carreras añaden dimensión al deporte, al mostrar las emociones reales en momentos críticos. George Russell, director de la GPDA, comentó:
"Nuestros miembros son adultos, no necesitan que se les den instrucciones sobre asuntos triviales".
Pilotos de Fórmula 1 unidos por la transparencia
La GPDA pidió transparencia en la distribución de fondos provenientes de multas. Desde hace 3 años, solicitan detalles sobre cómo se asignan estos recursos y su impacto positivo en el deporte.
La publicación de esta carta representa la primera declaración pública conjunta de los pilotos desde 2017, cuando pidieron reformar el proceso de toma de decisiones en la F1. Este movimiento refleja su frustración con la actual dirección de la FIA. Los pilotos desean colaborar constructivamente con todas las partes interesadas para beneficiar al deporte y su comunidad.
Con esta situación aún en desarrollo, queda por ver cómo responderá la FIA a las demandas de los pilotos y si se logrará un entendimiento mutuo que fortalezca la Fórmula 1 como espectáculo y deporte profesional.