El gobernador de Virginia, Ralph Northam, firmó este martes 11 de mayo la Orden Ejecutiva Setenta y Ocho en la que declaró un estado de emergencia para abordar las interrupciones del suministro de gasolina en todo el Commonwealth.
Northam aprobó la orden para afrontar el ataque cibernético al sistema de Colonial Pipeline, hecho ocurrido el 7 de mayo, que obligó a cesar parcialmente las operaciones.
Colonial Pipeline es la principal fuente de combustible para muchos minoristas en Virginia, de acuerdo con un comunicado de la oficina del gobernador.
Si bien la Agencia de Protección Ambiental (EPA) ha emitido una exención temporal para el transporte de combustible a fin de aumentar el suministro de gasolina, la declaración de emergencia del gobernador permite a las agencias estatales emitir sus propias exenciones según lo requiera el estado.
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La Orden Ejecutiva Setenta y Ocho también proporciona mayor flexibilidad y financiamiento para que los gobiernos estatales y locales garanticen un suministro de combustible adecuado.
“Esta declaración de emergencia ayudará a la Commonwealth a prepararse para cualquier posible escasez de suministro y garantizará que los conductores de Virginia tengan acceso a combustible mientras respondemos a esta situación en evolución”, dijo Northam.
Más temprano, el administrador de la EPA, Michael Regan, emitió una exención de emergencia para ayudar a aliviar la escasez de combustible en Virginia y otros estados, cuyo suministro de gasolina reformulada se ha visto afectado por el cierre del oleoducto.
Esta exención continuará hasta el 18 de mayo de 2021.
Con información de nota de prensa.
