(c) 2021, Bloomberg - Patrick Gillespie
La Reserva Federal de EEUU, como muchos bancos centrales, considera que la inflación que ha surgido por la reapertura de las economías que fueron interrumpidas por la pandemia es de carácter “transitorio”, y no se espera que incremente las tasas de interés hasta al menos el año que viene. En Latinoamérica, por contraste, las autoridades económicas tienen prisa por revertir los extremadamente bajos costos para préstamos.
Desde finales de junio, los bancos centrales de México, Perú, Chile, Uruguay e incluso Paraguay imitaron la decisión inicial de Brasil de incrementar las tasas de interés, y muchos esperan que Colombia también lo haga. Latinoamérica quizá fue la región del mundo más golpeada por el covid-19 y está experimentando un rápido repunte económico que pone presión sobre los precios. Otras razones para la diferencia, sin embargo, pueden tener que ver con los altos niveles de desigualdad, informalidad e inestabilidad política en el continente – aunado a una historia de explosiones inflacionarias enraizadas en la memoria económica colectiva.
- ¿Qué ha estado impulsando la inflación?
Alrededor del mundo, los precios han subido más rápido que de costumbre a medida que las restricciones relacionadas con la pandemia culminan y se libera la demanda previamente retenida de los consumidores que las cadenas de suministros no han podido satisfacer. Algunos factores han afectado a Latinoamérica en particular. Por ejemplo, el incremento global en los precios de los alimentos y la energía ha tenido un impacto desproporcionadamente grande en la región más desigual del mundo: los precios de los alimentos constituyen una mayor parte de los índices de inflación en Latinoamérica en comparación con los de las economías avanzadas como la de EEUU. Eso significa que los elevados costos de los alimentos – la carne ha aumentado un 43% en Brasil – han jugado un papel importante en la inflación general.
2. ¿Existen otros factores específicos para Latinoamérica?
Sí. Muchos países en la región también son importadores netos de energía, y han experimentado un aumento en los precios de la gasolina a medida que la creciente demanda ha llevado a la congestión en los mercados globales de petróleo. Recientes revueltas sociales también han desencadenado alta volatilidad en algunas monedas. Hay una fuerte relación entre los precios y las monedas en Latinoamérica, y las devaluaciones se manifiestan inmediatamente en la inflación. Mientras tanto, los gobiernos enfrentan una continua presión por incrementar el gasto social para lidiar con el aumento de la pobreza provocado por la pandemia. La probabilidad de que haya mayores déficits ha preocupado a los inversionistas en cuanto a las perspectivas de las monedas y ha incrementado sus expectativas inflacionarias, lo cual a menudo lleva a que los negocios locales incrementen sus precios y a que los trabajadores exijan aumentos salariales a corto plazo para apertrecharse ante la futura inflación. Todo esto aunado a que la región tiene un largo historial inflacionario: un promedio del 100% anual a finales de los ochenta y comienzos de los noventa, de acuerdo al Fondo Monetario Internacional.
3. ¿Qué tan grave es la inflación y qué han hecho los bancos centrales?
Los precios al consumo para el mes de julio fueron los siguientes:
- Brasil: 9% año-sobre-año (a/a) - la más alta desde 2016. Banco Central: cuatro incrementos de las tasas de interés desde marzo para un total de 325 puntos base hasta llegar a5,25%.
- México: 5,8% (cerca de la más alta desde finales de 2017). Banco Central: dos incrementos de ¼ de punto hasta 4,5%.
- Chile: 4,5% (la más alta desde 2016). Banco Central: dos incrementos, incluyendo el más alto en dos décadas, para un total de 100 puntos básicos hasta 1,50%.
- Perú: 5% (la más alta desde 2009). Banco Central: primer incremento en cinco años hasta 0,5%.
- Uruguay: 7,3% (de 10% hace un año). Banco Central: 50 puntos base hasta a 5%.
- Paraguay: 5,6% (la más alta desde 2014). Banco Central: Incremento de ¼ de punto hasta 1%, el primer incremento en más de cinco años.
- Colombia: 4% (la más alta desde finales de 2017). El Banco Central señaló que pronto podría incrementar las tasas de interés.
4. ¿Por qué están actuando ahora los bancos centrales?
Están tratando de huir del tipo de deterioro en las tasas de intercambio que comúnmente ocurre en las economías emergentes cuando crecen las expectativas de inflación. Latinoamérica ya alberga a cuatro de las peores seis monedas entre los mercados emergentes este año. También están reaccionando ante una recuperación económica que ha sido más rápida de lo que se esperaba – ahora se estima que la economía de la región crezca este año al mayor ritmo desde 2009. Luego hay un contexto político aún sin definir, con protestas violentas en Colombia, un nuevo gobierno de izquierda en Perú, y temores de que el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, esté intentando menoscabar las elecciones del año entrante.
5. ¿Cuál es el beneficio de estos incrementos en tasas?
En algunos países, la inflación está incrementando por encima de los rangos establecidos por la autoridad monetaria, así que controlar los precios también está relacionado con la credibilidad política en una región de instituciones frágiles. Algunos analistas dicen que incrementar las tasas de interés permitirá preservar la recuperación económica al anclar las expectativas de inflación, acumulando credibilidad y contrarrestando lo que algunos inversionistas perciben como un estímulo excesivo. Y los sentimientos de Wall Street son críticos para Latinoamérica, donde los bonos soberanos y las monedas pueden desplomarse en tan sólo una noche ante la menor señal de crisis política o de cambios drásticos en las políticas económicas. En países con riesgos políticos, creciente inflación y economías en crecimiento, “es tiempo de que empecemos la desaceleración”, indicó Alberto Ramos, jefe de análisis latinoamericano en Goldman Sachs.
6. ¿Cuáles son los riesgos de aumentar las tasas de interés en la región?
Tasas de interés más altas crean mayores obligaciones de deuda y mayores déficits fiscales, lo cual a su vez puede representar una amenaza para la recuperación a largo plazo. Incrementos en las tasas de interés están haciendo más costosa la deuda interna en un momento en el cual la carga de deuda de la región se ha incrementado a sus niveles más altos en 30 años y los países tratan de recortar los gastos relacionados al Covid. Ése es uno de los riesgos que implican las decisiones de los bancos centrales: las autoridades han estado divididas en México, Colombia y Uruguay sobre si incrementar o no las tasas de interés. Una tercera ola de casos de Covid por la variante Delta, ahora circulando por la región, podría descarrilar la recuperación económica. “Existe cierta renuencia en la región a un endurecimiento muy duro de las políticas económicas”, indica Alejandro Cuadrado, jefe de estrategia para monedas latinoamericanas en BBVA en Nueva York. “En la mayoría de los casos el efecto generado por la política monetaria es lento”.
7. ¿Por qué los incrementos en las tasas de interés no tienen un impacto inmediato en Latinoamérica?
Las economías latinoamericanas son conocidas por sus altos niveles de informalidad laboral – pagos en efectivo, bajos salarios en empresas que típicamente no califican para préstamos. Esta porción de la fuerza laboral – así como la de los patrones – se espera que crezca aún más durante la recuperación después de la pandemia, poniendo a una mayor parte de la economía fuera del sistema financiero formal. Y más de la mitad de la población adulta de la región no tenía cuenta bancaria antes de la pandemia. Con tanta actividad fuera de los libros, el aumento en las tasas de interés no tiene un impacto tan inmediato en Latinoamérica como el que tiene en EEUU o Europa.
8. ¿Qué están proyectando a futuro los bancos?
Que se esperan más incrementos próximamente. El Banco Central de Brasil ya ha pronosticado otro incremento de 100 puntos base para septiembre, mientras que Colombia debe hacerlo poco después. Para Cuadrado, del BBVA, la mayoría de los bancos centrales de Latinoamérica continuarán incrementando las tasas de interés este año. La notable excepción es Argentina, la cual no sigue un sistema de anclaje inflacionario, y no está planificando aumentar las tasas de interés en el futuro cercano a pesar de una inflación del 52%. Las autoridades económicas en Buenos Aires temen que un incremento en las tasas de interés podría más bien causar una aceleración de la inflación porque el aumento en pagos de intereses incrementaría la masa monetaria circulante.
Lea el artículo original aquí.