Los dos grandes rivales del fútbol español protagonizan un clásico más en el Santiago Bernabéu, pero con un toque bastante peculiar y es que, además de ser decisivo para el título de la Liga, hay mucho que pelear en el campo luego de que los culé saliesen eliminados en los cuartos de la Champions.
El Real Madrid parece estar llamado a ganar luego de sellar la eliminación del Bayern de Múnich en la misma Champions. La oportunidad de oro está en sus manos y ante su acérrimo rival, el cual podría perder todos los títulos grandes está semana próxima.
Zinedine Zidane sabe que es el momento deseado por cualquier madridista y su misión es calmar las aguas y sacar al terreno a un equipo confiado pero no demasiado, certero en http://elplaneta.com/admin/news/story/add/#el ataque y sólido en la defensa.
El Barça, por su parte, solo podrá encontrar consuelo en la victoria. Su honor estará en el terreno y todo se tratará de ganar o morir en el último clásico de Luis Enrique como técnico azulgrana.
La inconsistencia de los últimos partidos ha hecho gala de su debacle, pero una victoria en el Bernabéu podría redirigir su destino. Tienen tres puntos y un partido menos que el Real Madrid.
Messi en deuda
Todos los barcelonistas salen al terreno con la mira en la victoria luego de la dolorosa caída ante la Juve, pero nadie más que Lio Messi destila urgencia por perforar la red del contrario.
Y es que aunque sigue siendo el máximo goleador de los clásicos con 21 tantos en 33 duelos, El argentino no le marca al Real Madrid en un clásico desde el 23 de marzo de 2014 cuando consiguió un triplete en el 3-4 logrado por el Barça del Tata Martino.
Es por ello que el argentino saldrá a liderar a un cabizbajo Barcelona ansioso de resarcirse con sus fanáticos y demás seguidores del buen fútbol.
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