Mediante una comunicación, la isla de Cuba le reiteró este miércoles a Estados Unidos que “no hay evidencias, hipótesis creíble o conclusiones” sobre los incidentes de salud reportados por sus diplomáticos en La Habana.
Asimismo, quisieron mostrar su “invariable compromiso” de cooperar con las autoridades para esclarecer esta situación, a pesar de que la delegación ministerial cubana le pidió a Washington desistir de la “manipulación política” con el caso porque siguen sin existir evidencias o conclusiones a pesar de que ha transcurrido más de un año de investigaciones.
Por lo tanto, Cuba exigió la cooperación para el esclarecimiento de la situación porque el Gobierno de la isla “ha sido, es y será una prioridad” garantizar la salud y la seguridad.
Sin embargo, Washington informó recientemente que la cifra de diplomáticos que han sufrido problemas de salud en La Habana durante misión ascienden a 26 tras confirmar dos nuevos casos.
Los presuntos ataques contra los diplomáticos estadounidenses en Cuba tuvieron lugar entre noviembre de 2016 y agosto de 2017.
De todas formas, Estados Unidos no ha podido determinar “quién o qué” dañó la salud de su personal, que inclusive llegaron a presentar conmociones cerebrales.
En septiembre del año pasado, Washington evacuó de La Habana a todo su personal, excepto el esencial, prohibió que casi todos los funcionarios estadounidenses viajen para la isla del Caribe.
Con información de EFE.