Este lunes el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, promulgó la derogación de la ley conocida popularmente como autoblindaje parlamentario, que pretendía aumentar la mayoría absoluta de dos tercios el número de votos necesarios para la pérdida de investidura de un congresista.
La semana pasada la Cámara de Diputados primero, y la de Senadores después, aprobaron la derogación, dentro de un contexto de protestas ciudadanas exigiendo la renuncia o la pérdida de investidura de varios legisladores imputados.
Según la agencia de noticias EFE, la sanción de los congresistas, que pasó luego al Ejecutivo, recuperó así la mayoría simple para que se diera la pérdida de investidura, que serían 23 votos en el Senado y 41 en diputados, en lugar de 30 y 53, como pretendía la normativa anterior.