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Ex presidente Saca deberá devolver al Estado salvadoreño $ 260 millones

El ex presidente salvadoreño Antonio Saca fue condenado este jueves a 10 años de prisión luego de que el Tribunal Segundo de Sentencia efectuara durante 17 días un juicio abreviado.

Además del ex mandatario, también fue condenado  a 10 años su ex secretario privado, Elmer Charlaix. César Funes, ex secretario de Juventud; y Julio Rank,  ex secretario de Comunicaciones, recibieron una sentencia de 5 años.

Los empleados de Casa Presidencial (Capres) Francisco Arteaga y Jorge Herrera fueron condenados a 6 y 3 años de cárcel, respectivamente.

El juez Segundo de Sentencia estableció que todos los procesados deberán además pagar sumas entre $ 3 y $ 260 millones en concepto de responsabilidad civil.

El ex presidente de El Salvador fue condenado a pagar $ 260 millones, Charlaix debe devolver al Estado $ 15 millones, César Funes más de $ 886 mil, mientras que Julio Rank deberá cancelar más de $ 8 millones.

El ex jefe de la UFI de Capres Francisco Rodríguez Arteaga debe pagar $ 7 millones y Jorge Herrera, ex tesorero, $ 3 millones.

Pablo Gómez, quien no se sometió al proceso abreviado, fue condenado a 16 años y deberá pagar la suma de $ 5 millones.

El abogado defensor de Julio Rank, Lisandro Quintanilla, manifestó que van a apelar el monto impuesto en concepto de responsabilidad civil.

Montos exactos que deben pagar los imputados al Estado:

  • Élmer Charlaix: $ 15 millones
  • César Funes: $ 886.697,97
  • Julio Rank: $ 8.381.130,39
  • Francisco Rodríguez Arteaga: $ 7 millones
  • Jorge Herrera: $ 3 millones
  • Pablo Gómez: $ 5 millones

Tras el fallo, el jefe de la Unidad Investigación Financiera de la Fiscalía, Jorge Cortez, se mostró satisfecho por la condena impuesta a los siete procesados.

Saca y Charlaix fueron condenados por los delitos de lavado de dinero y peculado, mientras que los otros cinco implicados en el caso de corrupción solo recibieron sentencia por lavado de dinero.

A inicios de agosto, seis de los siete imputados, acusados de desviar $ 301 millones provenientes de fondos públicos durante el gobierno de Saca (2004-2009) se declararon culpables y confesaron el cometimiento de los delitos.

Saca fue el primero en rendir su confesión antes los jueces, en la declaración dijo que durante su administración desvió fondos de la cuenta de la Presidencia para enriquecerse él, sus empresas y a terceras personas.

Tras escuchar las confesiones, el tribunal avaló el juicio abreviado solicitado por la Fiscalía.

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