La detonación de un artefacto explosivo contra la Escuela General Santander podría tratarse de un hecho sin precedentes en la historia de la violencia colombiana. Información que está pendiente de ser confirmada indica que un hombre logró entrar hasta el lugar violando los controles de seguridad.
El vehículo quedó registrado por cámaras de seguridad. Unas primeras versiones indican que se movilizaba a alta velocidad por la autopista sur y que al llegar a la Escuela, habría violado los controles de la guardia y pasó por encima de los conos ubicados en la portería. Aunque los auxiliares habrían abierto fuego al vehículo, este terminó estrellado con los alojamientos y estalló, dejando por lo menos a nueve personas muertas.
La gran interrogante es si la explosión se debió al choque o que contaba con un dispositivo de activación. Esta versión se desprende de las conversaciones radiofónicas sostenidas por miembros de los organismos de seguridad a cargo de atender la emergencia.
Hasta el momento, ningún grupo armado se ha atribuído la responsabilidad sobre el atentado. Las autoridades trabajan en confirmar la forma en que se realizó el ataque y qué tipo de explosivo pudo haber sido usado. La Embajada de Estados Unidos ofreció asistencia en la investigación.
La escuela de cadetes general Santander es una de las instituciones más insignes de la Policía, allí es donde se forman los futuros oficiales. De esas aulas se gradúan cada año varios contingentes en el grado de subtenientes. Se trata de la Alma Máter de todos los comandantes y directores que ha tenido la Policía.
Fuente: Semana