Por vigésimo cuarto sábado consecutivo, los chalecos amarillos invadieron las calles de París, en esta ocasión para rechazar fuertemente la política del presidente Emmanuel Macron, pronunciada el jueves pasado.
Desde la capital parisina los chalecos amarillos, convocados por el sindicato Confederación General del Trabajo (CGT) contaron con el apoyo de partidos de izquierdas como la Francia Insumisa (LFI) y el Partido Comunista Francés (PCF).
Los manifestantes según reportó Efe, transitaron pacíficamente entre la estación de Montparnasse y la plaza de Italia, pues recordemos que las autoridades ya les habían prohibido a sus organizadores realizar sus concentraciones “en la avenida de los Campos Elíseos y en el entorno de la catedral de Notre Dame”.
La marcha según explicaron los manifestantes se debía a las políticas anunciadas por Macron este jueves, en las que les anunciaba a los parisinos “un segundo paquete de medidas destinado a apagar la crisis de los chalecos amarillos”. Medidas entre las que se encuentra “una rebaja del impuesto sobre la renta a las clases medias y el progresivo restablecimiento de la indexación de las pensiones a la inflación”.
Con información de Efe y La Patilla