Cuando la planificación se rompe, es necesario brindarle espacio a la creatividad e improvisación. A esto apelará Tite, seleccionador de Brasil, durante su andar en la Copa América, en donde la Canarinha organiza la cita y cuya máxima figura actual, Neymar, se ausentará luego de sufrir una lesión durante un amistoso contra Catar.
El atacante de Paris Saint Germain (PSG), campeón de la primera división de Francia, sufrió un esguince del ligamento lateral externo del tobillo derecho en el duelo de preparación a la cita, por lo que estará de baja al menos por cuatro semanas, tiempo en el que le tocará ver desde las gradas el accionar del combinado de casa en el torneo continental.
No obstante, y luego de que el cuerpo médico del club galo sometiera al delantero a una exhaustiva revisión, se determinó que el exjugador del Barcelona y Santos no necesitará pasar por el quirófano para reparar la zona dañada.
A través de un comunicado, el PSG anunció que “el tratamiento de esta lesión se articulará en torno a una rehabilitación funcional. El regreso del delantero debería producirse dentro de cuatro semanas”.
Pese a tratarse de una lesión sencilla, es el cuándo lo que empaña la situación. Neymar, referente de su selección, tenía la tarea de demostrar que a pesar de no portar la banda de capitán era el elemento a seguir dentro del grupo, el líder anímico y quien anote ante el rival de turno. Pero ahora todo cambió y eso, aunque se trate de un campeonato por países, repercute en su presente con el club parisino.
Opciones sobre el gramado
Mientras el presente de Neymar es un laberinto oscuro, en la concentración brasileña aún buscan opciones. El primer paso que dio Tite fue llamar a Willian, del Chelsea, para ocupar la plaza del jugador del PSG, una noticia que a muchos les cayó de sorpresa al volver a dejar por fuera al joven Vinicius, actualmente en el Real Madrid, pero que en la recta final de la temporada en España vio poca acción por lesión.
No obstante, otra de las piezas que podría tener más uso sería David Neres, un chico de apenas 22 años de edad que deslumbró en la Liga de Campeones con el uniforme del sorprendente Ajax de Ámsterdam, club holandés que avanzó hasta las semifinales del torneo continental apoyado en una base de jugadores de poca experiencia.
En el último amistoso, anotó en la paliza que Brasil le propinó (7-0) a Honduras. Ese fue además su primer tanto con la camiseta de su país.
Al terminar ese choque y en atención a los medios, dijo que “frente al arco en lo único que podía pensar es en hacer las cosas bien. Miré hacia el medio a ver si había alguien en el centro del área y no había nadie desmarcado, de modo que la terminé yo mismo”.
Por su parte, Tite no se guardó los elogios. “David jugó un gran partido. Cuando adelantó la pelota antes de anotar, yo dije, ‘(el defensor) ya no lo agarra’”.
