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La NBA probará en su filial una nueva dinámica de tiros libres

Como parte de un proceso donde el cambio siempre es bienvenido, la NBA apunta a una serie de modificaciones en las que el norte pasa por reducir los tiempos de juego. La meta, simple: hacer que los compromisos bajen de las dos horas.

Para ello, este año se usará a la filial, la G-League, como conejillo de indias en una dinámica que será aplicada sobre las faltas y su influencia en los tiros libres.

A partir de la campaña 2019-2020, la liga de desarrollo dará vida al valor de los tiros libres más allá de un punto.

Por ejemplo, si hay bonificación o la falta fue en la mecánica de tiro y el jugador deber hacer dos tiros, este se sustituirá por uno de dos puntos. Lo propio aplicará para la falta detrás de la línea de los tres puntos.

En el caso de que sea solo un punto el que esté en juego tras la infracción, se mantendrá la tradición de ejecutar un tiro.

Sin embargo, la medida no se aplicará en la recta final de los encuentros, todo esto con la misión de hacer que la presión que genera verse en la línea para intentar ganar el choque se sostenga.

Para la NBA, este será el patrón a cumplir en su filial, pero la misma podría trascender a la competencia principal más temprano que tarde.

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