El gigante tecnológico Apple suspendió las ventas de sus productos en Rusia y limitó el uso de la aplicacion Apple Pay dentro del país, como una medida para aumentar la presión sobre el Kremlin, anunció la empresa la tarde este martes. La decisión es parte de un conjunto de restricciones que han impuesto diversas compañías después de la invasión de Ucrania.
Lo que tienes que saber. Apple, el fabricante de iPhone, dijo que a raíz de la invasión a Ucrania, la semana pasada que detuvo todas las exportaciones por canal de ventas en Rusia, lo cual incluye revendedores, como grandes minoristas y sitios web.
- Además de Apple Pay, otros servicios han sido limitados. RT News y Sputnik News ya no están disponibles para descargar desde la App Store fuera de Rusia.
- Apple también desactivó para Ucrania el tráfico y los incidentes en vivo en Apple Maps como medida de seguridad y precaución para los ucranianos. Google hizo lo mismo el fin de semana.
- Apple es la última empresa en imponer restricciones en Rusia, las principales redes sociales del mundo prohibieron los canales de propaganda rusos en Europa.
El recuento. La medida de Apple se produjo después de que el ministro de transformación digital de Ucrania, Mykhailo Fedorov , envió una carta a fines de la semana pasada al director ejecutivo de Apple, Tim Cook, pidiéndole a la compañía que deje de suministrar servicios de Apple a Rusia y que bloquee la App Store dentro del país.
- En su cuenta de Twitter, Fedorov ha mencionado a Youtube, Google, Spotify, así como otras empresas tecnológicas, pidiéndoles apoyo y medidas específicas contra agencias rusas.
Esto es lo que dijeron. “Estamos profundamente preocupados por la invasión rusa de Ucrania y apoyamos a todas las personas que sufren como resultado de la violencia. Estamos apoyando los esfuerzos humanitarios, brindando ayuda para la crisis de refugiados que se desarrolla y haciendo todo lo posible para apoyar a nuestros equipos en la región”, señaló Apple en un comunicado este martes.
Fuente principal de la noticia:The Washington Post.
