La decisión de la Corte Suprema de anular el caso de Roe v. Wade que garantizaba el derecho federal al aborto causó consternación en las organizaciones que promueven los derechos reproductivos de las mujeres de todo Estados Unidos.
Las organizaciones ya han adelantado que organizan acciones para rechazar la restricción al aborto. Al menos una docena de grupos pro aborto han expresado su descontento ante la anulación y han lanzado fuertes críticas sobre el alto tribunal y a sus jueces a quienes señalan por “haberles fallado”.
“El tribunal nos ha fallado a todos, pero esto está lejos de terminar. Sabemos lo que quieren los políticos porque ya está ocurriendo: prohibir el aborto estado por estado y eventualmente una prohibición nacional. Pero, al igual que las generaciones anteriores, lucharemos unos por otros”, escribió Planned Parenthood a través de su cuenta en Twitter.
“Estamos enfadados y devastados. Con esta decisión #DobbsvJackson, el SCOTUS ha anulado el caso Roe v. Wade y ha desmantelado el derecho al aborto. En las próximas semanas vamos a empezar a ver cómo se restringen o se prohíben directamente los abortos en los estados de todo el país”, fustigó Liberate Abortion Coalition.
El Guttmatcher Institute también emitió un comunicado en el que critica ampliamente la decisión. “Esta decisión tiene enormes consecuencias para las mujeres embarazadas en todo el país y hará más difícil o imposible el acceso a la atención del aborto en muchos estados. Este es un golpe masivo a la salud reproductiva, los derechos y la justicia”.
La organización prometió que de cara al futuro continuarán haciendo seguimiento a la situación legal de la interrupción del embarazo.
Su directora Elizabeth Nash se declaró sorprendida de que la Corte Suprema revoca un derecho civil establecido desde hace casi 50 años. “Con la anulación del derecho al aborto por parte del Tribunal, se ha abierto la puerta para socavar o eviscerar otros derechos civiles, como el de las personas LGBTQ+, el derecho a casarse con la persona que se ama, la anticoncepción y otros servicios sanitarios y el derecho de los jóvenes a la atención sanitaria reproductiva, para empezar”, sostuvo.
Advocates for Youth advirtió que las jóvenes de bajos ingresos serán las más afectadas por la decisión del máximo tribunal.
“Esta decisión es un error”, escribió Nancy Northup, Presidenta y Directora General del Center for Reproductive Rights. Para la ejecutiva en Estados Unidos se avecina un caos total, porque la gente se verá obligada a viajar a través de múltiples estados para poder realizar un procedimiento. "La decisión de hoy provocará una emergencia de salud pública”.
Por su parte la American Civil Liberties Union (ACLU) advirtió que los embarazos forzosos generan incertidumbre, miedo y una catástrofe de justicia de género, racial y económica con consecuencias mortales. “Los impactos recaen con más fuerza en las mujeres negras que ya se enfrentan a una grave crisis de mortalidad materna”, añadió. “Sabemos que los políticos antiabortistas no se detendrán aquí”, sentenciaron.