Un mar de detractores con camisetas rojas estampadas con las palabras “Say Gay”, frente al Magic Kingdom de Walt Disney World, fue combustible suficiente para que personas homosexuales viajaran este fin de semana hasta el parque de atracciones para celebrar el Gay Days.
Mark Stegall y Robert Motz sabían que habían tomado la decisión correcta de viajar a Florida cuando vieron esas imágenes. Ambos son residentes de Galesburg, una ciudad en Illinois, y asisten anualmente al evento organizado en Disney por la comunidad LGBTQ.
“Estamos aquí porque son los Gay Days, es así de simple. Disney les da la bienvenida a todos. Tal vez el gobernador de Florida no, pero Disney sí”, comentó Stegall el sábado.
La reunión masiva del Mes del Orgullo marcó una muestra de desafío este fin de semana en un estado donde los bibliotecarios han estado sacando libros de temática gay de los estantes, los maestros ya no pueden hablar sobre identidad de género u orientación sexual y muchas familias LGBTQ se sienten atacadas.
El Gay Days en Disney comenzó hace tres décadas para reunir a personas y familias LGBTQ en un entorno en el que se sintieran incluidos en lugar de marginados.
Si bien el gigante del entretenimiento no patrocina el evento, ha recibido a cientos de miles de visitantes a lo largo de los años, lo que lo convierte en uno de los acontecimientos del Mes del Orgullo más grandes del país.
Los viajeros se visten con camisas rojas para identificarse en los parques temáticos. También hay una exposición LGBTQ, fiestas en la piscina y un concurso de belleza Miss Gay Days en otros lugares cercanos.
El Gay Days marchó sin percances en Disney
Los organizadores informaron que las reservas en el hotel anfitrión llegaron más lentamente de lo normal, pero que al final se reservamos las mil habitaciones.
Un evento, llamado Taste of Gay Days, se eliminó de la programación después de que personas se negaran a realizarlo.
Pero el espectáculo continuó. La mercancía con los colores del arcoíris diseñada por Disney, incluido un Mickey Mouse de peluche que ondeaba una bandera del Orgullo, salió volando de los estantes casi tan rápido como se pudo reabastecer. Se llevó a cabo el bingo Drag Queen.
Todo sucedió, aunque el director ejecutivo de Gay Days, Joseph Clark, dijo que las advertencias de viajes de grupos de derechos civiles e igualdad que desaconsejaban viajar a Florida habían afectado la participación.
“Para algunos es el aspecto de la seguridad, para otros, no quieren gastar dinero en un estado que no los apoya. Mi mensaje ha sido: 'Necesitamos su ayuda aquí en Florida'", comentó Clark.
DeSantis pretende convertir Florida en un sitio anti gay
La reunión se ha encontrado detractores en Florida antes. Grupos religiosos, incluida la Convención Bautista del Sur, han protestado y boicoteado los parques en el pasado.
Ahora que DeSantis discute con Disney, el parque se ha convertido en un epicentro de la guerra cultural del gobernador contra todas las cosas "despertadas", un término que invoca con frecuencia para impulsar la legislación que impone restricciones a la comunidad LGBTQ.
La disputa ha generado críticas incluso de los republicanos que dicen que ha cruzado la línea al usar los poderes del estado para apuntar a una corporación independiente.
Disney demandó recientemente a DeSantis, alegando que el gobernador violó sus derechos de la Primera Enmienda cuando fue atacado después de expresar su desaprobación de una ley que los críticos denominan "no digas gay".
La ley de derechos de los padres en la educación, que prohíbe la instrucción sobre género y sexualidad en las escuelas, se amplió a principios de este año para cubrir todos los grados.
Muchos maestros y administradores escolares reportaron que el vago lenguaje de la ley los ha llevado a quitar las banderas del arcoíris y las calcomanías de espacio seguro de sus aulas por temor a que puedan provocar una conversación prohibida.
