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El consumo excesivo de vitamina B se relaciona con el riesgo de cardiopatías

El consumo excesivo de vitamina B se relaciona con el riesgo de cardiopatías
Shameel mukkath vía Pexels

Un estudio reciente ha revelado una relación inesperada entre niveles altos de niacina y un mayor riesgo de enfermedad cardiaca, debido a la inflamación y daño vascular que provoca esta vitamina B.

La investigación publicada en Nature Medicine destaca este riesgo derivado de la niacina, presente en alimentos como carne, pescado, frutos secos y cereales enriquecidos. El Dr. Stanley Hazen, autor principal del estudio, advierte que un cuarto de los estadounidenses tiene niveles de niacina por encima de lo recomendado, lo que puede aumentar el riesgo cardiovascular.

Mali Maeder vía Pexels

A pesar de que la línea divisoria entre niveles saludables y perjudiciales de niacina sigue siendo difusa, se aconseja evitar los suplementos de niacina gracias a estas recientes investigaciones.

La vitamina B y la niacina mas a fondo

Antes de la era de las estatinas, los médicos recomendaban suplementos de niacina para mejorar el colesterol. El enriquecimiento de alimentos con niacina desde la década de 1940 ha ayudado a prevenir la pelagra, una enfermedad mortal causada por deficiencia de niacina.

El estudio liderado por el Dr. Stanley Hazen exploró factores de riesgo ocultos de enfermedades cardíacas mediante análisis de sangre de pacientes. Se identificó una sustancia producida en niveles excesivos de niacina que se relaciona con ataques cardíacos y derrames cerebrales inminentes.

El director de trastornos cardio metabólicos de la Escuela Icahn de Medicina en Monte Sinaí, Dr. Robert Rosenson, elogió los resultados como significativos, y se vislumbra la posibilidad de desarrollar un medicamento para reducir la inflamación vascular y prevenir eventos cardiovasculares.

Otros expertos como la Dra. Amanda Doran expresó su sorpresa ante el potencial de la niacina para aumentar el riesgo cardíaco y describió el estudio como poderoso por su enfoque integral en datos clínicos y genéticos. Esta vía de investigación podría inspirar estrategias para mitigar la inflamación vascular, representando un avance emocionante en el campo.