En un esfuerzo por superar un déficit presupuestario previsto de 700 millones de dólares para 2025, la alcaldesa de Washington DC, Muriel Bowser, ha trazado una estrategia financiera expansiva, reseña WJLA.
La propuesta de presupuesto para 2025 de la alcaldesa muestra que el déficit de 700 millones de dólares se subsanará con más de 1.000 millones de dólares en recortes y subidas de impuestos.
Este plan, que equilibra las reducciones estratégicas de gastos con subidas selectivas de impuestos, pretende garantizar la estabilidad económica de la ciudad sin sacrificar su dinamismo y crecimiento.
Un elemento central del planteamiento de la alcaldesa Bowser es una reserva de 20.900 millones de dólares para gastos operativos, complementada con una inversión de 11.800 millones de dólares en proyectos de capital.
La alcaldesa Bowser tiene previsto presentar este anteproyecto financiero al concejo de la ciudad, dando inicio a un periodo crítico de revisión de 70 días según la normativa del distrito.
La propuesta de presupuesto incluye la restauración de los impuestos a las empresas a sus niveles de 2021 en virtud de la política de permisos familiares retribuidos, el aumento de los impuestos sobre las ventas y la introducción de una nueva tasa 911 para los huéspedes de los hoteles.
La ciudad también tiene que hacer frente a importantes obligaciones financieras, como una contribución de 928 millones de dólares a la Autoridad de Tránsito del Área Metropolitana de Washington, 1.400 millones de dólares para iniciativas educativas y 200 millones de dólares para gastos de jubilación.
El plan reafirma el compromiso de la administración Bowser de mejorar la seguridad comunitaria y la educación. Propone la incorporación de 40 nuevos agentes de seguridad comunitaria al Departamento de Policía Metropolitana e importantes inversiones en tecnología de lucha contra la delincuencia. En el frente educativo, el plan impulsa las escuelas de DC con un aumento de la financiación de 349 millones de dólares, centrándose en la tutoría, la contratación de profesores y los servicios de alimentación.
El presupuesto de capital también asigna 515 millones de dólares para revitalizar Chinatown, subrayando la intención de la administración de invertir en la vitalidad y el atractivo de la ciudad a largo plazo. Esta iniciativa forma parte de un esfuerzo más amplio no sólo para sortear los retos fiscales actuales, sino para sentar las bases de un crecimiento y una seguridad sostenibles.
