¿Sabías que la salud de tu corazón también depende de lo que bebes? Así es, además de comer bien y moverte a diario, elegir las bebidas adecuadas puede marcar la diferencia.
El agua es la bebida por excelencia para un corazón feliz y saludable. Esta lleva nutrientes esenciales a todas las células de tu cuerpo, elimina desechos y toxinas, liberando a tu corazón de una carga extra y mantiene la temperatura corporal adecuada, lo que es crucial para que tu corazón siga su ritmo.
También hay otras bebidas que pueden ser tus mejores amigas para un corazón sano:
Té y café: bebidas aliadas del corazón si se consumen con moderación
El té y el café, partes integrales de la rutina de muchas personas, también pueden apoyar un estilo de vida consciente del corazón cuando se consumen adecuadamente.
La Asociación Estadounidense del Corazón (AHA) señala que es crucial disfrutar de estas bebidas en sus formas puras -limitando los azúcares añadidos- y modular la ingesta de cafeína en función de la salud y la sensibilidad individuales.
El té verde, en particular, es rico en antioxidantes que pueden ayudar a proteger el corazón contra el daño oxidativo. El café puede ayudar a mejorar la función arterial y reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.
Es importante moderar el consumo de cafeína, ya que un exceso puede aumentar la presión arterial y la frecuencia cardíaca. Se recomienda no consumir más de 4 tazas de café al día.
Leche a base de plantas
La leche vegetal sin sabor puede ser una parte saludable de una dieta para el corazón. Aunque no aumenta ni disminuye el riesgo de cardiopatías, puede ser una fuente importante de calcio, proteínas y otros minerales esenciales para la salud ósea y muscular. Además, es una alternativa adecuada para personas con intolerancia a la lactosa o alergias a la leche de vaca.
Algunas opciones son:
- leche de soja
- leche de almendras
- leche de arroz
- leche de avena
Si decides tomar leches vegetales, es importante que compruebes el panel de información nutricional. Elige una enriquecida con calcio y sin (o con menos) azúcar añadido.
Un vaso pequeño de jugo
Un vaso pequeño (125 ml) de jugo 100% de frutas o verduras ocasionalmente puede ser parte de una dieta saludable para el corazón. Los jugos de frutas y verduras son ricos en vitaminas, minerales y antioxidantes.
Pero es importante limitar el consumo de jugos, ya que pueden ser altos en azúcar natural. Se recomienda diluir los jugos con agua para reducir su contenido de azúcar.
¿Qué bebidas debo evitar para cuidar mi corazón?
Refrescos y bebidas azucaradas
Los refrescos, cordiales, bebidas de frutas, bebidas deportivas, bebidas energéticas y tés helados son ricos en azúcar y bajos en nutrientes. Su consumo regular puede aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas, obesidad y otros problemas de salud.
Para un corazón sano: agua, té, café… y nada de alcohol
El consumo excesivo de alcohol puede dañar el corazón y aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas, accidente cerebrovascular y otros problemas de salud.
Las directrices recomiendan a hombres y mujeres sanos no consumir más de 10 bebidas estándar por semana y no más de 4 bebidas en un solo día.
Beber agua y otras bebidas saludables, como té, café y leche vegetal sin sabor, puede contribuir a mantener un corazón sano. Es importante evitar las bebidas azucaradas, el alcohol y el consumo excesivo de jugos. Recuerda que una dieta saludable, ejercicio regular y hábitos de vida saludables son esenciales para prevenir las enfermedades cardíacas y mantener una buena salud en general.