Como parte de las celebraciones del Día de la Independencia, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se dirigió al país en el tradicional discurso por parte del jefe de Estado cada 4 de julio.
Desde el Lincoln Memorial en Washington D.C., el mandatario recordó con orgullo las acciones de los padres fundadores y lo que hoy en día representa para los ciudadanos estadounidenses formar parte de la conocida potencia mundial
“Somos parte de una de las historias más importantes del mundo: la historia de Estados Unidos. Es la historia épica de una gran nación cuya gente arriesgó todo por lo que consideraban correcto y verdadero”, indicó.
“Es la historia de ciudadanos valientes que nunca se dieron por vencidos por un futuro mejor”.
El empresario aseguró que “en ese momento (hace 243 años), los padres fundadores se reunieron para defender nuestros derechos dados por Dios”.
“Con una hoja y 56 firmas, Estados Unidos comenzó el camino más importante en la política”, siguió.
Manifestó que parte del éxito de la nación ha sido gracias al esfuerzo de “grandes ciudadanos que luchan por la calidad y la justicia” y recordó los avances y medidas que dejó atrás el territorio norteamericano, destacando las luchas sociales por parte de distintos personajes en pro de la inclusión.
Trump expresó que “no hay nada imposible” para los ciudadanos norteamericanos y prometió que su país volverá a tener presencia en la luna. “Vamos a ir otra vez a la Luna pronto, y plantaremos la bandera de Estados Unidos en Marte pronto”, dijo.