Majid Takht-Ravanchi, representante iraní en las Naciones Unidas, señaló este 9 de enero frente al Consejo de Seguridad de la ONU que la respuesta de su país ante la operación estadounidense que acabó con la vida del general Qasem Soleimani, fue “comedida”.
Asimismo, el diplomático calificó como un ataque terrorista la dinámica del pasado viernes por parte de Norteamérica contra el poderoso funcionario.
En el inicio de su corto discurso, Takht-Ravanchi expresó sus condolencias para los allegados a las víctimas del avión comercial ucraniano que se precipitó en territorio iraní y que, según denuncias, habría sido derribado por el gobierno local.
176 personas perdieron la vida en dicho accidente.
Mientras, el representante ucraniano en la ONU, Sergiy Kyslytsya, manifestó que su país pidió a Irán el acceso total a los detalles del hecho, en una investigación que desde ya despertó el debate mundial.
En un comunicado firmado por el ministro de Exteriores iraní, Mohammad Yavad Zarif, el funcionario indicó que “el mundo se encuentra en una encrucijada con el fin de los monopolios del poder y un régimen descontrolado que está intentado de forma muy nerviosa retroceder en el tiempo”.
Mientras tanto, Takht-Ravanchi añadió que “el unilateralismo norteamericano ha generado daños que, además, suponen un desafío a las normas y al derecho internacionales”.
“El 8 de enero se cometió una acción desde una base aérea de Irak y se atacó por la vía armada con cobardía al mártir general Soleimaní, a lo que le siguió una respuesta proporcional y comedida a este ataque terrorista en el ejercicio de nuestro derecho a la defensa propia de acuerdo a la Carta” de la ONU, siguió.
