Tommy Sisk, de 62 años, murió el pasado domingo 4 de octubre mientras estaba recluido en la Correccional Federal de Petersburg, en Virginia; sin embargo, más dudas que certezas quedaron en el aire, lo que llevó a sus familiares a exigir respuestas.
La familia del recluso, ubicada en Carolina del Norte, dijo a ABC que se enteraron por los medios sobre la muerte del ser querido.
Según el relato de Wayne Sisk, hermano menor de la víctima, un amigo de la familia lo llamó el día 13 del mes en curso para avisarle sobre la situación.
“Dijo ‘hola, ¿sabes que Tommy murió?'”, comentó a la fuente.
Sisk cumplía con una condena de diez años en prisión por posesión de metanfetamina en 2019.
Según Wayne, su amigo había leído la noticia antes de llamar al familiar. “Deberían haber contactado a nuestra familia y mostrarnos algo de respeto. No tenemos a nuestro hermano. No tenemos nada”, dijo Sisk. “No tenemos a nuestro familiar”.
De acuerdo con el Departamento de Justicia local, el recluso tenía condiciones médicas preexistentes que aceleraron las complicaciones del coronavirus que terminaron acabando con su vida.
Sisk sufría de diabetes y el 14 de septiembre dio positivo al COVID-19. Inmediatamente fue aislado en el centro de seguridad. Un médico del sitio lo evaluó el 23 del mismo mes por presentar dificultadas para respirar y tuvo que ser llevado a un hospital, donde fue conectado a un respirador.
“Deberían haber empezado a buscarnos”, señaló Sisk.
Según ABC, el proceso de notificación de muertes de la Oficina Federal de Prisiones pasa por reunir toda la información del reo, desde sus datos personales hasta su historial delictivo. Posteriormente, se realiza la solicitud de la autopsia. Después de los resultados de esta, se notifica a los familiares sobre la baja.
Virginia ha sido noticia por la ubicación de un centro de detención ICE en Farmville, el cual vio un aumento significativo de casos de coronavirus. La justicia intervino y obligó a solicitar una supervisión al sitio para saber si las autoridades aplican las respectivas medidas para evitar la propagación del virus, el cual suma más de 150 mil positivos en la entidad.