Las autoridades ordenaron este lunes 10 de julio a empleadores de buena parte de China que limiten los trabajos al aire libre. Esto debido a las temperaturas abrasadoras y se pidió a la población en el este y suroeste que se prepare para lluvias torrenciales. Al tiempo que el país se enfrenta al calor, inundaciones y sequía.
Según medios internacionales temperaturas de hasta 40 grados Celsius se registraron en varias ciudades, entre ellas Shijiazhuang, al suroeste de Beijing, la capital. Máximas de 35 °C a 38 °C fueron reportadas en Beijing, Guangzhou en el sur, Chongqing en el suroeste y Shenyang en el noreste.
La agencia meteorológica emitió una alerta naranja por calor en el sur de China y buena parte del norte y el noreste. La alerta naranja requiere que los empleadores limiten las labores al aire libre, aunque los repartidores de restaurantes y minoristas por Internet seguían trabajando.
El Ministerio de Agricultura advirtió el domingo 9 de julio de que el persistente clima cálido podría dañar las cosechas de arroz. Al tiempo que indicó que las autoridades locales deben asegurarse de que las plantaciones de arroz cuenten con agua suficiente para evitar una maduración prematura de la cosecha.
Lluvias seguirán en China
Por su parte, el Ministerio de Recursos Hídricos advirtió a las provincias de Shandong en la costa este y Sichuan en el suroeste que se preparen para fuertes lluvias del martes al viernes, según medios internacionales.
“A las empresas y escuelas de la provincia de Heilongjiang, en el noreste del país, se les ordenó cerrar y desconectar los equipos eléctricos al aire libre luego que cayeran 84 milímetros de lluvia en una hora”, de acuerdo a lo señalado en la nota.
Decenas de miles de personas que fueron expulsadas de sus hogares por las inundaciones. Y han sido trasladados a refugios en el norte, centro y sureste de China. Los residentes en algunas ciudades han acudido a los refugios antiaéreos para escapar del calor.