Los residentes y trabajadores de Washington DC podrían enfrentarse pronto a impuestos más elevados. El presidente del Concejo de DC, Phil Mendelson, reveló el martes un plan para aumentar ciertos impuestos sobre la propiedad e implantar impuestos adicionales a los empleadores, reseña NBC Washington.
El objetivo de esta medida es restablecer la financiación de programas que anteriormente habían sido objeto de recortes por parte de la alcaldesa Muriel Bowser.
Con un inminente déficit presupuestario de 700 millones de dólares el año que viene, el concejo se enfrenta a la dura tarea de equilibrar la responsabilidad fiscal con la equidad social. La estrategia de Mendelson implica subidas de impuestos para garantizar que no se pierdan programas vitales. La propuesta presupuestaria de la alcaldesa Bowser sugería subir el tipo del impuesto sobre las ventas y suprimir el servicio de autobús Circulator.
El martes, Mendelson confirmó que, aunque es probable que la subida del impuesto sobre las ventas y la supresión del autobús Circulator se mantengan en el presupuesto, se mitigarán los recortes adicionales en otros programas. En concreto, la propuesta presupuestaria del concejo restablece 70 millones de dólares para el Fondo de Igualdad Salarial para Educadores de la Primera Infancia y 31,7 millones de dólares para el Fondo de Acceso a la Justicia, ambos suprimidos en la versión del presupuesto de Bowser.
La financiación adicional, que asciende a 50 millones de dólares, también se destinará a programas de ayuda a la vivienda y al alquiler. La solución de Mendelson depende de varios ajustes fiscales clave. Entre ellos, el aumento del tipo del impuesto sobre bienes inmuebles para las viviendas cuyo valor sea igual o superior a 2,5 millones de dólares, y la subida del impuesto sobre nóminas para los permisos familiares retribuidos del 0,62% al 0,75%. La propuesta también prevé eliminar las exenciones fiscales sobre los bonos municipales.
"Significa que las personas con más riqueza pagan un porcentaje mayor de sus ingresos o riqueza en impuestos que las personas con poca riqueza. Eso es progresividad en términos fiscales. Y, normalmente, el impuesto sobre bienes inmuebles no tiene progresividad, así que creo que esto es algo bueno", explicó Mendelson a los periodistas.
Sin embargo, este enfoque no está exento de detractores. Mendelson planea eludir la recomendación del director financiero de reponer por completo los fondos de reserva del Distrito, una medida que retiraría 217 millones de dólares del presupuesto.
Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de que el Congreso intervenga sobre estas decisiones fiscales, especialmente a la luz de recientes disputas como el proyecto de ley contra el crimen, Mendelson se mostró confiado. "Espero que sea posible, quizá probable, que articule esa preocupación sobre la liquidez, pero en cuanto a si ese presupuesto está equilibrado, lo estará", declaró.
El concejo votará este presupuesto el miércoles, sentando las bases para una decisión crítica que podría redefinir el panorama financiero de Washington DC.