El secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), Alejandro Mayorkas, viajó el lunes al campamento improvisado en Del Río, Texas, donde han llegado casi 15 mil migrantes que cruzan la frontera. Rápidamente se vio envuelto en una creciente controversia sobre el trato que los agentes estadounidenses dieron a estas personas, en su mayoría haitianos.
El contexto: El domingo, fotógrafos captaron a lo largo del Río Grande cómo agentes de la Patrulla Fronteriza, montados a caballo, intentaron agarrar a los migrantes y usaron sus animales para empujarlos de regreso hacia México. En un video se escucha a un agente gritar una obscenidad mientras un niño salta fuera del camino del caballo.
- Mayorkas dijo a los periodistas en Del Río que el DHS investigaría el incidente. El lunes por la noche, a medida que aumentaban las críticas, el departamento emitió un comunicado más formal con el anuncio.
- El jefe de la Patrulla Fronteriza, Raúl Ortiz, informó que desplegó a los agentes a caballo para “averiguar si había algún individuo en peligro y poder brindar información e inteligencia” sobre qué ocurría.
¿Qué dicen? “El Departamento de Seguridad Nacional no tolera el abuso de los migrantes bajo nuestra custodia y nos tomamos muy en serio estas acusaciones (...) los hechos que se conozcan de la investigación completa, que se llevará a cabo rápidamente, definirán las medidas disciplinarias apropiadas que se tomarán”, se lee en la declaración del DHS.
- El representante Bennie G. Thompson (D), presidente del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, denunció el comportamiento de los agentes.
- La representante Alexandria Ocasio-Cortez (D) describió las escenas como “una mancha” para Estados Unidos.
Fuente principal de la noticia: The Washington Post.