Con la crisis de Venezuela como punto importante en la agenda de varios países del mundo, Estados Unidos ha sido uno de los más fuertes en pronunciarse contra el régimen de Nicolás Maduro.
Este miércoles, a través de Robert Palladino, portavoz del Departamento de Estado, el gobierno del presidente Donald Trump insistió en mantenerse firme contra el Ejecutivo del país caribeño, blanco de críticas.
“Hay muchos países que son activos con nosotros, y es una clara mayoría y siempre hay más cosas que podemos hacer. Necesitamos aplicar una presión sostenida sobre el régimen de Maduro”, señaló el funcionario.
Venezuela atraviesa una de las peores crisis en la región, con fuertes niveles de inseguridad, escasez de medicinas y alimentos, hiperinflación y una fuerte crisis migratoria que ha impactado en el continente.
Palladino señaló que los países deben asumir acciones “necesarias para un retorno a la democracia”, lo cual aliviaría el “sufrimiento” de sus ciudadanos.
Asimismo, recordó una serie de exigencias hechas en el pasado tanto por la comunidad internacional como la oposición venezolana, con la liberación de los presos políticos como bandera.
