Aún con par de pasos para ver bajar el telón de la temporada 2018-2019 de la NBA, las gerencias de todos los quipos ya empiezan a darle forma a la próxima campaña, barajando nombres de piezas que podrían llegar a sus filas, potenciando su juego y apuntando a ser un cuadro fijo en la fiesta de los playoffs.
Algunos de estos arribarían por la vía de agencia libre, haciendo de la chequera la principal herramienta para que usen nuevo uniforme. Pero otros lo harían a través de los cambios, con transacciones en las que las oficinas deberán jugar a ese ajedrez para saber sacrificar elementos sin alterar el ritmo ni generar sensaciones negativas en fanáticos y compañeros de organización.
Esto, aunque de momento es tomado como un fuerte rumor, atañe a los Wizards de Washington, franquicia que se perdió la postemporada, pero que tuvo en la figura de Bradley Beal a un basquetbolista clave durante la ronda regular, motivo que abrió los ojos de otros conjuntos, los cuales aspiran a tocar la puerta en la capital para averiguar más y, en caso de ser posible, llevárselo.
Buscado en Colorado
Cuando las cosas salen bien, un jugador puede verse como estrella y a la vez como objetivo. Este es el caso del escolta de los hechiceros, quien estaría en la órbita de los Nuggets de Denver, el conjunto con la segunda mejor marca en la Conferencia del Oeste, una de las organizaciones más sorpresivas del curso, y donde aspiran a la regularidad en altos puestos para las próximas zafras.
Ahí es cuando Beal entra en juego. Hoy en día, el nativo de San Luis se encargó de tomar el testigo de John Wall, en la oscuridad de las lesiones, y quien debería estar así por largo rato, para guiar a los suyos. A pesar de no haber obtenido el boleto a la siguiente instancia, lo que hizo no fue cosa menor, promediando 25.6 unidades por encuentro, tope personal. En otras estadísticas como asistencias, rebotes y robos, también estableció nuevas marcas.
Esa capacidad de superación y, sobre todo, de asumir el liderazgo con tanta facilidad, iluminó a los Nuggets, dueños de una plantilla joven a la que no le vendría mal incorporar a un conductor como él, quien con sus 25 años parece ser un hombre de mil batallas en la NBA, siempre dispuesto a aprender y a sumar.
Dan Favale, de Bleacher Report, fue el encargado de anunciar el interés desde Colorado sobre Beal; no obstante, lo que dificultaría el movimiento sería la necesidad de involucrar a una tercera franquicia.
La fuente reveló que la más cercana a dar con esto serían los Suns de Phoenix. El cuadro desértico recibiría a un jugador (Jamal Murray) y en Denver solo se quedarían con el mencionado escolta de los Wizards, dejando gran parte de la ganancia a Washington.
Según los detalles de Favale, los hechiceros se harían con los servicios de Mikal Bridges, De’Anthony Melton, Mason Plumlee, Michael Porter Jr., Torrey Craig y dos elecciones del draft 2020, uno de primera ronda y otro de segunda.
Aunque en el papel no parece un mal negocio, en la capital de Estados Unidos podría gestarse un nuevo movimiento que proteja al escolta, quien demostró su capacidad para mandar, hacer bien las cosas, y ser la cara del grupo mientras Wall se recupera. El problema, el bajo presupuesto para la 2019-2020, más cuando el lesionado base aseguraría $37.8 millones como parte de un contrato que supera los $140 millones y que se extiende hasta la 2022-2023, esta última campaña como parte de la opción del jugador.
El momento de Anthony Davis
Si algún jugador podría protagonizar el gran cambio en la temporada baja ese sería Anthony Davis. El referente de los Pelicans de Nueva Orleans y una de las piezas de mayor talento en toda la NBA ya fue noticia. A inicio de año, el ala-pívot era objeto de fuertes rumores sobre su salida de la organización de Luisiana para poner rumbo fijo a Los Ángeles. Su destino: los Lakers.
Pero aunque presuntamente pidió a la gerencia de los alados que la abriera la puerta de salida para juntarse con LeBron James, desde las oficinas pusieron la vara muy alta. Los laguneros presentaron varias ofertas, poniendo en la mayoría de ellas a su talento joven, con Kyle Kuzma, Lonzo Ball y Brandon Ingram como monedas de cambio, pero nada fue lo suficientemente atractivo para que en Nueva Orleans aceptaran una transacción.
El hecho dejó claras dos cosas: la primera, que los Pelicans no dejarán ir a su estrella de forma sencilla. La segunda, que el núcleo joven de los Lakers no llama tanto la atención como antes de que estos debutaran en la liga.
La situación abre una pequeña puerta de esperanza a los Celtics de Boston, también con varios recién llegados al profesional que serían más llamativos que sus colegas en California.
Jayson Tatum y Jalen Brown son dos de esos. Cuesta creer que en Massachusetts los despedirían, pero contar con Davis es apuntar sin mayores riesgos al título. Con la necesidad de pelear por estar en las finales, pero sin fuerza en la pintura, su adquisición sería más que ideal para el cuadro verde, un gigante que dejó mucho que desear en la ronda regular de la temporada que aún sigue su curso.
¿Qué pasará con Kevin Durant?
A los pudientes económicamente, hay un nombre que le gusta por encima del resto: Kevin Durant.
El alero que viste el uniforme de los Warriors de Golden State daría un paso al costado luego de tanto éxito con los de Oakland, combinado al que llegó luego de ver el fracaso tocar la puerta en los playoffs de 2016, cuando era miembro del Thunder de Oklahoma City y fue sacado en la final del Oeste precisamente por los Warriors pese a tener encaminada la serie por 3-1.
Nadie duda de él. Durant es uno de los mejores anotadores no solo de esta generación, sino de la historia de la NBA. El de Washington es uno de los exponentes más curiosos de la liga por su agilidad a pesar de su estatura (2.06 metros). Ganador de un premio como Jugador Más Valioso y dos títulos de liga, el excelso anotador sigue siendo el más buscado en ciertos mercados.
Se espera que el conjunto más agresivo sean los Knicks de Nueva York, un escenario ideal, pero que debe ganarse la confianza de un tipo de su envergadura tras los fracasos recientes.
Clippers de Los Ángeles, Lakers e incluso los Nets de Brooklyn también se asomarían y harían ofertas por él, en un cheque de muchos ceros asegurados pese a que de un atleta próximo a cumplir 31 años de edad.