En un acto de desafío, más de 100 graduados de la Universidad George Washington decidieron abandonar la universidad durante su ceremonia de graduación el pasado domingo. Su protesta llamó la atención sobre el actual conflicto en Gaza, pidiendo a la universidad que reconsidere sus tácticas de inversión, reseña WJLA.
El acto contó con dos momentos significativos de manifestación durante el discurso de la presidenta de GW, Ellen Granberg, acompañados de abucheos y cánticos audibles por parte de los estudiantes implicados.
Estos graduados no estaban solos en su protesta. Aproximadamente 50 jóvenes activistas se les unieron desde el otro lado de la calle, expresando insistentemente sus reivindicaciones durante toda la ocasión. Amani Ali, una de las líderes de la protesta de ascendencia palestina, compartió sus razones para participar.
"Participar en esta protesta me parecía esencial para honrar mi herencia", mencionó Ali durante su entrevista con 7News. También expresó su orgullo por la solidaridad mostrada por sus compañeros.
La reacción de otros asistentes fue variada. Mientras que algunos graduados y asistentes empatizaron con la protesta, otros sintieron que chocaba con la naturaleza alegre de la ceremonia de graduación. David Borasky, un invitado a la ceremonia, cuestionó en su conversación con 7News la eficacia de la protesta y su idoneidad durante un acto tan festivo.
Sin embargo, los manifestantes criticaron los vínculos financieros de la universidad con el apoyo a las acciones militares en Israel y prometieron persistir en su defensa. "Nuestro compromiso con el diálogo y el cambio no flaqueará", afirmó Yaya Anatanag, otra graduada manifestante.
Por el momento, la universidad no ha emitido una respuesta pública.