El anuncio de la jueza Ketanji Brown Jackson como nominada para ocupar la vacante que deja el retiro del juez Stephen Breyer ha generado desde aplausos hasta cautela. Aunque el comunicado de la Casa Blanca resalta su historial de confirmación con votos bipartidistas, algunos republicanos han dejado de manifiesto su insatisfacción.
El líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell felicitó a la juez Jackson en sus primeros comentarios sobre la decisión de Biden que la pone cerca del máximo tribunal del país y de hacer historia como la primera mujer negra en integrar el panel de nueve jueces. A la vez alentó a la Cámara alta a “llevar a cabo una revisión rigurosa y exhaustiva de la nominación de la juez Jackson como corresponde a un nombramiento vitalicio para nuestro tribunal supremo”, dijo en un comunicado.
McConnell también recordó que votó en contra durante el proceso de confirmación el año pasado y que, a pesar de su negativa, el Senado dio los votos necesarios para ascenderá como parte de la Corte de Apelaciones de Estados Unidos. “Desde entonces, entiendo que ha publicado un total de dos opiniones, ambas en las últimas semanas, y que uno de sus fallos anteriores fue revocado por un panel unánime de sus colegas actuales en el Circuito DC. También entiendo que la jueza Jackson fue la elección favorita de los grupos de dinero oscuro de extrema izquierda que han pasado años atacando la legitimidad y la estructura de la Corte misma”.
Antes dijeron que sí, ahora no sé. En el proceso de confirmación que la elevó como jueza de la Corte de Apelaciones para el distrito de Columbia, obtuvo tres votos republicanos, el de las senadoras Susan Collins, Lisa Murkowski y el senador Lindsey Graham.
Graham había presionado a Biden para elegir a la jueza J. Michelle Childs y poco después de saber la decisión final del presidente indicó que la selección significa que “la izquierda radical se ha ganado al presidente Biden una vez más”.
La senadora Collins elogió las calificaciones del juez Jackson. “Ketanji Brown Jackson es una jueza federal experimentada con impresionantes credenciales académicas y legales”, indicó y agregó que llevará a cabo “una investigación exhaustiva de la nominación de la jueza Jackson y espero su audiencia pública ante el Comité Judicial del Senado y reunirme con ella en mi oficina”.
Camino a la confirmación. Nombrar al nominado es apenas el inicio del camino. Durante su proceso de selección, Biden se acercó a algunos republicanos para lograr una votación bipartidista. Aunque podría lograr la confirmación solo con los demócratas del Senado, el apoyo republicano podría ayudar a construir su credibilidad y la de la Corte Suprema.
El presidente del Comité Judicial del Senado, Richard Durbin señaló en un comunicado que Biden “ha elegido a una candidata extraordinaria” y que “los logros de la jueza Jackson son bien conocidos por el Comité Judicial del Senado, ya que la aprobamos para el Circuito de DC hace menos de un año con apoyo bipartidista”.
Además, indicó que avanzarán “de inmediato” en su nominación con un enfoque “cuidadoso, justo y profesional”.
Ahora el Comité Judicial de Senado deberá verificar sus credenciales y antecedentes, luego se realizará una primera audiencia en la que Jackson responderá preguntas a este ente y luego vota el comité. Tras la decisión, se lleva a debate al pleno del Senado y culmina con una votación en la que se requiere mayoría simple para su aprobación.
Con información de The New York Times y The Washington Post